“Día Internacional del Dengue: Prevención y Mitos Desmentidos en Colombia”

En comparación con el chikunguña, el zika y el oropouche, enfermedades transmitidas por mosquitos, el dengue se distingue por generar fiebre alta y dolor intenso detrás de los ojos. Contrario a lo que se cree, el consumo de tiamina no disminuye el riesgo de contraer la enfermedad, y su tratamiento no debe incluir aromáticas, tés, ibuprofeno o aspirina, ya que estos pueden desencadenar hemorragias.

En Colombia, el dengue sigue representando un desafío significativo para la salud pública, con un número considerable de contagios. Esta enfermedad ha captado la atención de los médicos, quienes buscan reducir el riesgo de transmisión y salvar vidas. Hoy, 26 de agosto, se conmemora el Día Internacional de la Lucha contra el Dengue, una jornada destinada a promover acciones preventivas y educativas.

EPS Famisanar, comprometida con la salud de la población, ofrece recomendaciones y desmiente mitos sobre la prevención y tratamiento del dengue. Edna Flórez, líder de la entidad, explica que los síntomas del dengue incluyen fiebre moderada a alta, dolor de cabeza severo, dolor muscular y detrás de los ojos, así como erupciones en la piel. Además, menciona que existen cuatro serotipos de dengue, los cuales pueden afectar de manera diversa a quienes se infectan.

Flórez advierte que ante cualquier síntoma de dengue, es crucial acudir al médico de inmediato para evitar complicaciones graves. “La falta de atención oportuna puede llevar al paciente a desarrollar una forma más severa de la enfermedad, especialmente si es picado nuevamente por un mosquito portador de otro serotipo del virus”, subraya.

Contrario a lo que algunos creen, el dengue no solo afecta a niños y adultos, sino también a lactantes, y es posible reinfectarse incluso después de haber padecido la enfermedad. “La inmunidad adquirida tras la infección dura entre 3 y 6 meses; pasado este tiempo, la persona queda nuevamente expuesta a los mismos serotipos, salvo el que generó la primera infección, del cual queda inmunizada de por vida”, aclara Flórez.

La prevención del dengue se basa en eliminar los lugares donde el mosquito Aedes aegypti puede reproducirse, como tanques, piscinas y baldes. “Es fundamental almacenar el agua de manera limpia y cubierta para impedir que los mosquitos depositen sus huevos”, recomienda Flórez. También destaca la importancia de usar ropa protectora en climas cálidos y aplicar repelentes con DEET o caridina cada cuatro horas.

Flórez enfatiza que no existe evidencia científica que respalde el uso de tiamina como preventivo del dengue, y advierte sobre los peligros de la automedicación con ibuprofeno o aspirina, que pueden causar hemorragias. Además, el dengue puede tener graves consecuencias para la salud materna, incluyendo muerte fetal, bajo peso al nacer y partos prematuros.

Por último, el Oropouche, otra enfermedad transmitida por vectores, se propaga principalmente a través de la picadura del jején (Culicoides paraensis). Sus síntomas, que pueden durar de cinco a siete días, incluyen fiebre repentina, dolor de cabeza, rigidez articular y, en algunos casos, fotofobia, visión doble, náuseas y vómitos.

Si presenta síntomas de dengue, acuda al médico de inmediato y manténgase bien hidratado. Evite automedicarse, ya que esto es fundamental para superar la enfermedad de manera segura.